bicis robadas recuperadas

En Su Propia Trampa, robo de bicicletas en santiago

Un ladròn que se dedicaba a robar las bicis de competiciòn de las furgonetas de los equipos en la zona centro,cuando estaban compitiendo o en marchas ha sido localizado por la guardia civil.

Hasta ahora se han recuperado 4 bicis , 3 de mtb y 1 de carretera, además de algunas cosas más (casco, gafas, GPS...), el valor està entre 15.000 y 20.000 € en bicis. La Guardia civil a estas horas esta tratando de recuperar alguna bici más.

Informaciòn de nano trò al que le habìan robado su bici y que la ha recuperado en un plazo de un mes y un dìa . La bici de su compa muriel, una canyon de competiciòn , aùn no ha aparecido. No se puede explicitar màs informaciòn para que no afecte a la investigación ni vulnere los derechos del presunto autor...

de mi bici una cannondale flash 3 de carbòn robada en el festibike aùn no se sabe nada...

http://ceciliobenito.blogspot.com.es/2012/01/bici-robada-suma-y-sigue.html

http://ceciliobenito.blogspot.com.es/2011/09/un-trofeo-de-2500-robada-la-cannondale.html

otros enlaces de bicis robadas

http://ceciliobenito.blogspot.com.es/2011/08/robo-de-bicis-trimybikenumber.html

http://ceciliobenito.blogspot.com.es/2012/05/le-roban-la-bici-en-un-tri-en-madrid.html

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nano tro lo cuenta en su blog

Cuando el cielo se nubla – chapter I

10/07/2012 Actualidad, Bici, bici y más bici..., Metafísica One comment

Tenía un poco abandonado el blog. No por nada, pero… cuando no era por una cosa, era por otra. Y en los dos últimos meses, todas las horas de sueño y de trabajo que he perdido con este dichoso asunto de los robos, hoy se han transformado en ganas de contarlo.

Porque por contra de lo que dice mi amigo Ricar, sobre no hablar de esto, lo que yo voy a hacer es lo contrario, contarlo todo. Y es que, primer aviso, no se puede mirar para otro lado, y el que la hace, la paga… Ya lo explicaré más adelante, pero no me causa la más mínima inquietud hablar abiertamente de esto. Todo lo contrario. Me da SEGURIDAD.

¿Por dónde empezar cuando te roban la bici? Pues la verdad, no tengo una respuesta clara. Lo fácil sería decir que lo que suyo es hacer lo que esté en tu mano por recuperarla, pero… seamos sinceros, la mayoría acabamos bajando los brazos, derrotados, tan sólo pasados unos días.

Sí, das la noticia a todos tus conocidos, lo compartes en las redes sociales, incluso los que hemos trabajado en el sector de la bici solemos mandar “notas de prensa” más o menos formales a los medios de comunicación. Y puedes pasar horas y horas revisando los anuncios de venta en el SegundaMano, en MilAnuncios, en ForoMTB.com, etc. Hay incluso quien hace llegar la noticia a las tiendas de la zona, para que estén atentos a lo que “entra” en sus talleres… pero, la efervescencia del “voy-a-encontrarla” dura lo que dura… a veces unos días, a veces unas semanas, y a veces… ni eso.

, Pero la cosa puede complicarse más. ¿Qué hacer cuando te roban, a las pocas semanas, una segunda bici?

Como muchos sabéis, hace no demasiado nos robaron la bici de Muriel. Dos personas se alegraron. Uno, el ladrón que se la llevó; y otro, un indeseable que vive a 100 kms de Madrid, que quizá lea esto, y con quien no tardaré en ajustar cuentas (nunca mejor dicho). Lo prometo, porque como se dice por ahí “tu envidia es mi progreso”.

Y no voy a negar que, después de hacer algunas de esas cosas que he descrito al comienzo, terminamos “dándonos por jodidos”, dejando la cosa correr…

Pero hace sólo un mes, la cosa se puso peor, y nos robaron una segunda bici, esta vez la mía. Mismo modus operandi, bueno… quizá con un poco mas de violencia… pero tan similar, que empecé a creer a todos aquellos que me decían que se trataba de alguien que acudía a las carreras y marchas, y que era sistemático en, digamos, su “trabajo”.

Y volviendo al principio del post ¿qué hacer, más allá de poner la correspondiente denuncia? No sé, de verdad que no tengo respuesta, por mucho que haya escrito unas líneas antes…

Nosotros no tenemos mucho tiempo libre. En lugar de, como dice el “presunto”, robar para vivir (ja, me descojono…), nosotros trabajamos para vivir, y así no puedes dedicar todo tu tiempo a hacer lo que podría ayudar a recuperar las bicis robadas. La rutina y el trabajo te acaban envolviendo, y desvanecen ese efecto efervescente de “darlo todo” por encontrar aquello qué tanto te ha costado, y que tan fácilmente te han arrebatado.

Así que, si a la primera nos acabamos encogiendo de hombros, a la segunda no os quiero ni contar… bueno sí, os lo contaré, pero en próximos posts…

http://www.velocidadabsurda.com/?p=195

Antes de seguir con el relato de los hechos, quiero confesar.

Yo confieso, por si después de leer el primer post tenéis alguna duda, que había bajado los brazos, y que ya me había dado totalmente por derrotado.

Y lo que es aún más importante, yo confieso que, aunque pueda parecer que soy protagonista en esta historia, he sido sólo una de las “cuatro patas de la mesa” sobre la que hemos podido escribir una página con un final bastante feliz.

Porque la primera pata no he sido yo, sino que ha sido mi amigo Marcos, que un buen día descuelga el teléfono para ponerme sobre la pista de mi bici robada. No mirar para otro lado y preocuparte de algo que no te concierne directamente es muy de agradecer, Marcos. Gracias.

La segunda pata de la mesa, aunque tiene también nombre propio, el de mi amigo Álvaro, reúne y representa un cierto espíritu que sigue flotando en el grupo de los Re-Enganchados. Podemos estar más o menos dispersos, pero… algunos sabemos que si hace falta, sabemos a quién podemos recurrir. Y es que todo el grupo se ofrecio a ayudar, y no de boquilla, eran palabras mayores. Pero Álvaro se merece el agradecimiento de una manera especial, porque como os contaré, me ayudó y animó a conseguir la información necesaria para poder avanzar: ¡a seguir el rastro!. Gracias Alvarito, y gracias Re’s.

Internet siempre deja rastro, ¡¡siempre!!

Y la tercera pata, la “meretérica”, a la que acudí cuando pude reunir un buen puñado de datos que parecían encaminarnos al origen del problema. No pensaba yo entonces que, como aquel que dice, por una simple bicicleta, en el Área de Investigación del Núcleo Operativo de por aquí, perteneciente a la 2ª Compañía de por allá, de la Comandancia de acullá, se iban a tomar tan en serio e iban a poner tanto empeño en perseguir lo que a muchos, ajenos al mundo de la bici, puede parecer casi una chiquillada de robo. ¡Menuda chiquillada, cuando uno echa cuentas! Cristales y cerraduras rotas, y sólo a mi, han sido bicis robadas por valor de 6.500 €. Así que, igual de sinceras que las anteriores, Gracias a la Guardia Civil.

Yo, más que una pata, casi que soy la chapa que se pone debajo para que la mesa no cojee. Poca cosa, lo justito para que en esta mesa que nos ha tocado ocupar se esté a gusto, y se pueda seguir escribiendo esta historia. Vamos enseguida a ello.

http://www.velocidadabsurda.com/?p=217

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Al lío… nos ponemos a ello – chapter III

Niner robada y ofrecida en venta por el "presunto"

Otra de las bicis ofrecidas, una Ghost robada en Ronda

Bueno, vamos a darle candela a esto, aunque a muchos os va a decepcionar, porque igual esperáis una auténtica historia a lo CSI, y es mucho más sencillo que todo esto.

La realidad es que la clave principal está en el hecho de que el presunto ladrón haya ofrecido a la venta varias de las bicis que había robado, entre ellas la mía. Ya os lo decía, uno de los tres pilares en los que se basa nuestro éxito, había sido la llamada de Marcos.

Y es que, un amigo de un amigo de un amigo de mi amigo Marcos andaba buscando componentes para su bici, y encontró un anuncio de una horquilla de suspensión en una de estas páginas de compra-venta. Y hete aquí, que lo que empezó como un contacto de “a ver si me vale esa horquilla”, terminó con el vendedor ofreciéndole bicicletas completas. No una, no dos… ¡¡hasta cuatro!!.

El tío es listo, porque no ponía bicis completas a la venta en los anuncios. Pero la avaricia rompió el saco, y por vender una bici completa e ingresar unos cuantos cientos de euritos (miles, vaya), pues acabó ofreciendo el “surtido” de bicis completas que tenía en stock.

Al amigo del amigo del amigo de mi amigo no le cuadró eso, y le pregunto al amigo para que le preguntara al amigo del amigo si aquello era normal. Para saber si debía fiarse de ese ofrecimiento, y si debía pedirle algo al “presunto”, como factura original, garantía o lo que fuera.

Lo cierto es que la liebre saltó, y a la “cadena” de gente alertada no le costó mucho darse cuenta de que se estaban ofreciendo bicis robadas, en mi caso, porque se trata de una bici única… no hay, por el momento, otra en el mundo igual.

Así que la llamada de Marcos, en la que me preguntaba si era normal que se estuviera ofreciendo por ahí una bici como la mía, fue la mecha que prendió todo. Fue lo que me hizo venirme arriba, y pensar que no todo estaba perdido, que igual se podía tirar del hilo.

Le pido el teléfono del presunto, pero claro… Marcos no lo tiene, lo tiene un amigo de un amigo de un amigo suyo, que al enterarse de que las cuatro bicis que se le ofrecen son robadas, se vienen un poco abajo. Vaya, que le da un poco de “yuyu” meterse en líos… pero ya era tarde. La máquina estaba en marcha, y como les dije a ambos, no se puede mirar para otro lado en un caso así. A ninguno nos gusta tratar con “malincuentes”, pero una cosa es que te roben y te tengas que joder, y otra cosa es que sepas quién está ofreciendo tu bici robada, y tengas que joderte. A ver si encima de cornudo, va uno a tener que ser apaleado, o como dice el otro refrán castellano, a ver si encima de puta, tengo que poner la cama.

No sin vencer pequeñas y normales reticencias, consigo que me den el teléfono del “presunto”, y el nombre por el que se hace llamar: “Alex“. Estoy en el punto de partida. Tengo algo, pero… ¿le serviría de algo a la GC esto, o no me harían ni puñetero caso?

Pues ahí es donde entra mi amigo Álvaro, que me convence de que un número de teléfono y un nombre es más que suficiente para empezar a trabajar, que siempre quda rastro de todo. Me transmite uno de los valores más en desuso, la constancia, y sólo me queda ponerla en práctica con lo que tengo: un número de teléfono, un nombre, y 4 bicis robadas que se ofrecen a la venta.

Pero es que, además de las 4 bicis que se ofrecen a la venta, está de la Muriel, que fue robada sólo un mes antes que la mía, y con el mismo “modus operandi”. Forzando un vehículo, y llevándose bici y todo lo que está al alcance (maleta con ropa y material). Y aunque la de Muriel no ha sido ofrecida a este amigo de “cuarto grado”, es otro aliciente más para ponerse manos a la obra, a ver si podemos sacar algo en claro de todo esto.

Qué jod… ahora que ya ha acabado todo sabéis que hemos sacado algo en claro, pero… tendréis que esperar al próximo capítulo para saber más.

http://www.velocidadabsurda.com/?p=230

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Internet siempre deja rastro – chapter IV

18/07/2012 Actualidad, Bici, bici y más bici...,

Viene de: “Al lío… nos ponemos a ello – chapter III”.

Como decíamos ayer… siguiendo buenos consejos, con un teléfono y un nombre, “Alex“, debía bastar para tratar de avanzar en saber quién se estaba dedicando a jodernos con los robos.

Porque como podéis ver con la foto de mi NaNoFuRGo, y por lo que sé, en la mayoría de los casos, se ha tratado de robos con fuerza. Mi balance ha sido: cerradura rota la primera vez, y cristal y cinturón de seguridad segado (donde tenía candada la bici), además de un par de mochilas y el Camelbak nuevecito y lleno de herramientas, cámaras, etc.

El cristal de la NaNoFuRGo petado... y no sería lo único.

Pero volviendo al tema, escribiendo el teléfono del susodicho en Google, se obtiene fácilmente un resultado. Y es que aparece como teléfono de contacto de una empresa de cocinas de Yuncos, Toledo, muy cerquita de Parla, que es donde el “pájaro” había informado al comprador interesado que debería ir para ver las bicis ofertadas.

Bueno, algo es algo. Entonces recuerdo que, desde hace muchos años cuando trabajaba en Fruehauf, estoy dado de alta en el Registro Mercantil, donde, previo pago, se pueden hacer consultas sobre los datos públicos de las sociedades mercantiles. Pues venga, ¡vamos a ver!. Introduzco los datos de la empresa de cocinas, Arezzo Cocinas, y… ¡¡¡¡voilà!!!!

Todos los datos públicos sobre la empresa, y en concreto, el nombre del Administrador Único desde hace un par de años. Un tal… “Alejandro blablabla”… ¿Alejandro? ¿Alex? ¡¡Cuadra!! Ya tengo algo, un teléfono, un nombre y apellidos completos, y una dirección de curro.

Ahora, de momento, a seguir probando con “San Google“. Porque el nombre, compuesto, y los apellidos, no son muy comunes, de modo que igual hay suerte y consigo más información. En efecto, es poner el nombre y apellidos, tanto con “Alex” como con “Alejandro“, y… resulta que aparece en los resultados de muchas pruebas deportivas. Triatlon del Sertri, Duatlon-Cross Casa de Campo, Duatlon-Cross Cerro Negro en Talavera de la Reina, Maratón del Test the Best organizado por la revista Bike en Cercedilla, Maratón Riaza B-Pro, Duatlón-Cross de la Tortilla en Valdemoro, Campeonato Universitario de MTB de la Universidad Europea en Boadilla… la lista es larga.

Pausa. Primera reflexión. O sea que estoy ante un tío con ese número de teléfono, que se llama como el que está ofreciendo las bicis robadas, que trabaja cerca de donde enseña las bicis… y que además conoce perfectamente el mundo de las carreras. Joooood... Me viene a la cabeza ahora gente que después del segundo robo me insiste en que es alguién “profesionalizado” en ir a robar a las carreras, y… salta a la vista que es así.

Segunda reflexión. La lista es larga… ¿os dais cuenta de que muchos de vosotros habéis compartido parrillas, recorridos y transiciones con este pájaro? ¡¡Qué ascazo!! Es como tener al enemigo en casa… ¿Cómo puede estar tan enfermo para hacer algó así? ¿Como puede tener la desvergüenza de compartir un deporte mientras nos roba y nos impide a nosotros disfrutar de lo que nos gusta? En fin…

Ahora comienza sin duda la fase más coñazo de todo esto. Paso cientos de horas, días enteros, noches completas sin dormir revisando cada una de esas carreras donde el “presunto” ha participado. Las webs de las federaciones, las clasificaciones, las webs de los organizadores, los foros, las redes sociales, los blogs de los participantes o de los clubes que acuden y donde cuentan sus experiencias en esas carreras… todo buscando información y sobre todo fotos. Reviso cada una de ellas, cuando las hay, cotejando los dorsales, pero… nada. Ni rastro. Joder, el tío es bueno, se esconde bien.

Pues nada, hay que seguir, no hay que darse por vencido en este punto. A la segunda fase, que es… revisar todos y cada uno de los anuncios de bicis y componentes de SegundaMano, de Milanuncios, y de ForoMTB. Todos. Uno por uno, buscando cualquiera de las variables que manejo: las marcas y modelos de las bicis robadas, el nombre y el teléfono, las localidades de Parla y Yuncos, pero… nada. Ni rastro. Pues sí, va a ser que el tío es bueno haciendo lo que hace.

No desespero. Pasan las horas y los días, y lo repaso todo, hasta que… encuentro algo… la pista definitiva....

http://www.velocidadabsurda.com/?p=238

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¡¡¡Le tenemos!!! – chapter V

19/07/2012 Viene de: “Internet siempre deja rastro – chapter IV”.

Pues sí, revisando una y otra vez toda la información que estaba manejando, y ya con una comedura de tarro notable por no encontrar nada más allá de los primeros datos, di con una pista muy importante. El “presunto ladrón” de bicis, que responde como ya podéis saber a las iniciales A.M.B.L., había participado en el Triatlón de la Cadena Ser, el Sertri 2011, en la modalidad de relevos, con dos compañeros más. Así que, si no conseguía información directa de él, quizá la podría conseguir de sus compañeros de competición.

Porque, por si no lo había dicho, el presunto ladrón de bicis, que ya sabéis que competía, lo hacía con la licencia de un club deportivo, que responde al nombre de… bueno, digamos las iniciales… “G.A.“. Este club tiene su base en un conocido Centro de Deporte y Salud de Parla. Lo cual venía a confirmar que el “presunto”, que mandaba a ver las bicis a Parla, vivía allí mismo. Todo estaba cuadrando como un puzzle.

Pero a lo que vamos, el detalle de saber que había participado en la modalidad de relevos en el “Sertri“, me lleva a investigar los nombres de sus dos compañeros competición. Y con acierto pleno. Uno de sus compañeros, que responde a las siglas R.A.M., tiene sus álbumes de Facebook plagados de fotos de competiciones, en concreto duatlones y triatlones. En ellas, se le puede ver a él y al “presunto ladrón” nombrado como “Alex Makina” en diversas competiciones, con la llamativa equipación del club “G.A.“.

El "presunto ladrón" participando en el Sertri 2011 con una... B'twin

Las voy revisando despacio, poco a poco, pero con el subidón de haber encontrado algo más que me permita seguir avanzando. Y según las veo, salta la alarma. Veo al “presunto ladrón” participando en un Duatlón Cross en Talavera de la Reina, con una bici de montaña Conor. ¡¡¡No es una Conor normal!!! Es una de las Conor del equipo navarro “Conor-Saltoki“. ¿!¿!¿!¿!Pero cómo es posible?!?!?!?! Otra foto en el Duatlón-Cross de la Casa de Campo confirma que el tío compite con una bici presuntamente robada.

Si ya tenía claro que las cosas estaban encajando, ahora lo tengo más claro aún. En el mismo pueblo de la sierra madrileña, en la misma carrera de mountainbike, pero con un año de diferencia, dos bicis robadas: la Conor WRC de Diego Latasa, y la Grand Canyon CF de Muriel.

Días más tarde, se confirmaría. El manager del equipo Conor-Saltoki me confirma que el fabricante navarro pintó con esos llamativos colores naranjas sólo una docena de bicicletas, en poder del equipo. No hay duda, esa bici que en las fotos cabalga con desvergüenza el “presunto ladrón”, es la bici robada a Diego Latasa en el Open de Madrid de XC de Becerril de la Sierra en su edición del 2011.

Bueno, hemos dado con algo importante. Las fotos del Facebook de su compañero comfirman totalmente, como pruebas gráficas, algunas de las competiciones donde el “pájaro” ha participado, y en particular con alguna de las bicis presuntamente sustraídas.

Esa será la última noche que me quede sin dormir, recopilando toda la información que tengo, para llevársela a la Guardia Civil del puesto donde había presentado la denuncia del robo de la bici de Muriel. Pero, antes de hacerlo, me quedaba una cosa más por hacer. Ir a dar una vuelta por Parla, e ir a Yuncos a visitar la empresa en la que A.M.B.L. figuraba como administrador único.

Lo hago un sábado, y no me corto un pelo. Ni me molesto en llamar antes al teléfono fijo que figura en la web, junto con el móvil del “presunto”. Quizá si lo hubiera hecho, me hubiera ahorrado el viaje, porque en la nave nº 16 de una calle de un polígono de Yuncos, ya no está la empresa Arezzo Cocinas. Eso sí, en internet aún se encuentran fotos de cuando estaban. No la perdáis ojo.

Imagen de internet, de cuando existía Arezzo Cocinas... ¡¡ojo al coche!!

Con todo ello, me presento en el cuartel de la Guardia Civil de Becerril de la Sierra. Me hacen esperar. Cuando me llega el turno, un par de agentes escuchan atentos mi relato. Flipan. Les supera. Les parece un relato de ciencia ficción, y mientras escribo esto, ellos aún están en el capítulo I. Cuando alcanzan a comprender de qué va el tema, me recomiendan que acuda con toda la información al puesto de San Martín de Valdeiglesias, donde había puesto la denuncia de mi bici, y donde ellos mismos me dicen que podrán ayudarme de otro modo.

Y en efecto, cuando llego a San Martín y me preguntan que de qué se trata, y les digo que de la bici robada, me preguntan que… si el de la bici robada en la Epic Enduro, si el de la de Los 88, o el de los múltiples coches robados en La Ruta de los Vinos. ¡¡Qué triste!!

Pero bueno, al aclarárselo, me atienden los agentes de “Investigación”, y tras su sorpresa incial, comienzan a tomárselo muy, muy en serio.

http://www.velocidadabsurda.com/?p=254

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Y por fin, frente a frente – chapter VI 20/07/2012 Actualidad, Bici, bici y más bici.

Viene de: ¡¡¡Le tenemos!!! – chapter V

En el momento en el que lo habíamos dejado, todo había quedado en manos de la Guardia Civil. Hay que dejarles trabajar. Yo descanso un poco por fin, aunque no dejo de echar un ojo, y de repasar una y otra vez cada detalle, porque no quiero que se nos escape nada. En esas, se me ocurre hacer un calendario en el que figuren, tanto los robos que yo atribuyo a este pájaro, como las competiciones en las que participa.

Demoledor, especialmente los últimos meses, Mayo y Junio. Yo le atribuyo hasta 8 bicis robadas, y las que se me escapan… de modo que os podéis figurar el pedazo calendario…

Me quedan un par de cosas bastante claras, y es que por un lado no hay robos allá donde el “presunto” compite, y por otro lado el “presunto” no compite allá donde hay robos. Vaya, que el pájaro sabe diferenciar muy bien lo que hace cada fin de semana. Unos, los dedica a practicar su afición, y otros, a jod. a los demás la nuestra.

En ese seguimiento que está en marcha, observamos que el “presunto ladrón” que responde a las siglas de A.M.B.L. se ha inscrito en el Astromad, el triatlón que se celebra en distintas categorías en Robledo de Chavela, con el segmento de natación en la cercana Presa de Picadas. Allá nos desplazamos la Guardia Civil y yo. En mi caso, con la incógnita de si va a participar con una bicicleta robada que ha dado mucho que hablar: la Specialized de Jordi Pascual.

El tri comienza sobre las 15:00, pero yo echo allá todo el día, desde bien temprano. Quiero ver si le veo llegar, en qué vehículo lo hace, y tenerle controlado. Mientras doy vueltas y espero, me encuentro a Mario, el Alcalde de Robledo, un tío de 10 y un curioso verso suelto en el PP (ahora mismo expedientado por apoyar a los funcionarios de su ayuntamiento frente a los recortes). Se pone a mi entera disposición, lo cual sabe que le agradezco de corazón, pero… hay que dejar trabajar a la GC.

El R11 en el que se desplaza en "presunto ladrón"

A media mañana veo al presunto. Ha llegado a dejar sus cosas de correr en Robledo, en la zona de la segunda transición. Viene con un amigo, en concreto ese con el que corre y que tiene fotos en su facebook, y lo hacen en un coche que… quizá os suene. Es el R-11 que aparecía aparcado en la puerta de la empresa que hemos venido mencionando, cuando aún debía estar abierta, en esa foto que todavía hoy se puede encontrar en internet. No hay duda, es él. De allí, se marcha en el bus a Picadas a la salida del sector de natación, y al de la bici, donde ya muchos ojos le vigilan desde que llega. Yo me quedo en Robledo, donde vendrá posteriormente la GC, para mientras él hace el segmento de la carrera a pie,para ver su bici y tomar el número de serie. Llegan al polideportivo los primeros participantes de la categoría Sprint, en la que él está encuadrado (se ve que no da para más). El “presunto” llega a mitad de grupo, y cuando baja de la bici para echar a correr por el tapiz, pierde una de las zapatillas. Nos mira a la chica que hace de controladora y a mi, y masculla unas palabras haciéndose el gracioso. No consigue hacerme gracia, lo que consigue es darme más asco del que ya me daba. Con la zapatilla en la mano pasa a medio metro mío, pues yo estoy ahí para dejar constancia gráfica de que participa con una flamante Macario de carbono. Se ve que el pájaro es de morro fino, y ya no va con la B’twin chichera de aluminio con la que participó en el Sertri 2011. Se acostumbra a lo bueno.

Mientras él echa a correr, yo me tomo una cerveza en el bar del polideportivo, a mi salud, y a la del pobre hombre al que le hayan robado su Macario. Veo a lo lejos cómo la GC hace su trabajo tomando su número de serie.

El "presunto ladrón", con una Macario de carbono y de dudoso origen.

En los días posteriores al Astromad la cosa no avanza mucho. La legislación española es muy garantista… vaya, que a un puto chorizo no se le puede meter mano así como así, de modo que como no le pillemos con las manos en la masa, no hay nada que hacer.

Toca darle vueltas a la cabeza, a ver cómo nos lo podemos montar para tratar de resolver esto, porque cada día que pasa, sé que hay menos probabilidades de recuperar nuestras bicis.

http://www.velocidadabsurda.com/?p=267

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Colorín, colorado, esta bici la has robado – chapter VII.22/07/2012 Actualidad, Bici, bici y más bici..., Viene de: “Y por fin, frente a frente – chapter VI” Como os venía diciendo, yo tenía todos los cabos atados ya, pero la justicia… ay, la justicia… La GC me aseguraba que poco se podía hacer sin pillar al supuesto ladrón “in fraganti”. ¿Qué hacer? ¿Seguir vigilando las competiciones donde se pudiera apuntar, y aquellas en las que pudieran cometerse más robos? ¿O actuar?

Optamos por lo segundo, pues estaba claro que cada día que pasase era una oportunidad más que le estábamos dando para vender las bicis que estaba ofreciendo, o para seguir robando. Y visto lo visto, lo mejor era “salvar los muebles”, y tratar de recuperar al menos mi última bici robada, que aún estaba “de oferta”.

Por eso volví a contactar con Marcos, y con el amigo del amigo de su amigo, a quien hacía ya muchos días que les había ofrecido las bicis. Este chico que dió la voz de alarma no tenía, lógicamente, muchas ganas de meterse en líos, pero tras aquellas reticencias iniciales fue tremendamente comprensivo, y se ofreció a ayudarme a poner en marcha el “dispositivo”. El objetivo era que yo pudiese quedar con el presunto en una operación de “compra”.

De modo que le hizo saber al “pajarraco” que había un conocido de un compañero de rutas que buscaba bici (hablando de mi), y como la avaricia rompe el saco, al presunto le faltó tiempo para pedirle mi teléfono para llamarle. Esto lo hicimos un viernes tarde, y… tan sólo pasados unos minutos, ya me estaba llamando.

No era la primera vez que hablaba con él. Días atrás, el mismo día que le llevé toda la información a la GC, ya lo habíamos intentado. Habíamos encontrado un viejo anuncio en internet, de la venta de un GPS Dakota, con su nombre y su teléfono. Y lo probamos, por si sonaba la flauta, y además del GPS nos acababa de ofrecer las bicis. Pero esa vez no funcionó, el tío negó que lo tuviera a la venta, y no quiso “rollo”.

Pero esta vez que os cuento, sí. Me hizo algunas preguntas sobre lo que buscaba, a las que respondí con el simulado desconocimiento de un neófito. Con una tranquilidad que me sorprendió a mi mismo, fui capaz de contarle lo que buscaba, dejar que me ofreciera de primeras una de las bicis robadas, y… seguir la conversación hasta conseguir que me ofreciera mi propia bici. Tiene cojones, intentar comprar la bici que te han robado, jajajaja.

Le dije que estaba decidido, que me dejara unos días, pero que me las reservara. “Eso no le prometo, me dijo… hay veces que me duran semanas, y hay veces que sólo me duran unos días”. ¡¡Hijo de pu...!! Encima, presumiendo de sus habilidades vendedoras.

El "presunto", con la "presuntamente" robada Conor WRC de Diego Latasa

Dejamos correr el fin de semana, y planeamos quedar con él el martes siguiente. Pero, creo recordar que fue la misma tarde del domingo, contactó conmigo Alex, de RedCiclista, para contarme que a un amigo suyo le habían robado su bici tras una marcha de carretera. Cambiamos algo de información con Alex y el propio afectado, y tras ello, no dudé en apuntar en mi excel en el que contabilizo las hazañas de esta alimaña este robo de la bici de Jose Ramón. Como veremos después, poco me equivocaba.

La suerte estaba echada, y el martes nos pusimos en marcha hacia el sur de la comunidad, donde nos había citado para que viéramos las bicis. No fui sólo, lo hice con mi amigo y compi Ricar, que se apuntó a las primeras de cambio. Creo que hasta que no llegamos a Fuenlabrada, no fue consciente de en lo que nos estábamos metiendo jejejeje. Estuvimos un buen rato charlando, mientras esperábamos a la Guardia Civil. En ese rato, estudiamos todos los “escenarios” posibles, desde que me reconociera, hasta que nos hiciera subir a su casa, y muchos más. Todo podía pasar, y en cada una de esas situaciones, había cosas buenas, y cosas malas que podían suceder.

Lo repasamos todo con los tres agentes que vinieron, las posibilidades, las situaciones, y las reacciones que debíamos tener en cada caso. Incluso valoramos que yo no me presentara a la cita, para evitar ser reconocido. Al fin y al cabo, me había robado dos veces. Pero… ¡qué coño!. Allá que vamos Ricar y yo.

El pollo aparece con las dos bicis que me había ofrecido, una de ellas la mía. Y después de las presentaciones, nos cambiamos de acera, a la sombra. Apenas hizo falta decir cuatro palabras chorras, cuando los agentes de la GC se presentaron, y mi amigo y yo nos retiramos haciendo mutis por el foro, como se nos había pedido, y dejamos a los agentes hacer su trabajo.

No voy a negar que me quede con ganas de darle una hostia. Pero con estas leyes que tenemos, me hubiera metido en un lío. Las mismas ganas que de decirle: “tontorrón, yo no te doy más de 20 €, por habérmela cuidado”. Al fin y al cabo me la ofreció limpita. El caso es que nos fuimos a prestar declaración de lo sucedido, mientras la Guardia Civil hacía su trabajo, y recuperaba 4 bicis robadas. La Ghost que me había ofrecido y que había sido robada en los 101 de Ronda; una Niner robada en el Open BTT de Ciudad Real, en La Solana. La Dynatek que había robado ese mismo domingo en Colmenar de Oreja, y la mía, robada en San Martín de Valdeiglesias.

A partir de ahí, poco sé… las actuaciones judiciales supongo que están siguiendo su curso, y ni sé, ni me interesa lo que le pase o lo que le pueda pasar. Todo el respeto para la justicia, aunque confianza, pues… no mucha…

Bueno, sí, sé otra cosa más… si el otro día era Cecilio el que me contaba que le había robado el año pasado su Cannondale, con el mismo modus operandi, mientras escribo esto en esta tarde de domingo, me ha llamado mi amigo Juanma, para decirme que otro colega sufrió hace unos días el robo en su furgoneta, mientras esperaba a los podios de una competición de carretera, su Time súper exclusiva. No hay duda, ha sido este pajarraco.

¿Se podrán recuperar el resto de bicis robadas? Pues, para ser sincero, creo que no. Ni la de Muriel, ni el resto, incluida esta Time recién robada. Las que no haya vendido, las tendrá bien escondidas. O se irá deshaciendo de ellas poco a poco, tratando de no dejar pistas. Ahora debe estar escondido como una rata.

Pero… lo que no sabe este indeseable es que, igual que se ha topado conmigo, que en cuanto me dieron una pista puse todo mi empeñó en recuperar mi bici, un día le va a robar la bici a alguien que no tenga reparos en tomarse la justicia por su mano. Seguramente esto le dará igual, preferirá seguir robando justificándose en que no tiene trabajo, y viviendo su vida tranquilo, pero… igual alguna de las víctimas de sus robos que no pueda recuperar su bici le da tal paliza, que lo deja sin poder andar. Entonces, en lugar de tener que dedicarse a robar bicis, de lo que tendrá que preocuparse es de conseguir recambios para su silla de ruedas.

http://www.velocidadabsurda.com/?p=285

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Gracias y perdón – epílogo.

24/07/2012 Actualidad, Metafísica One comment

Lo primero, pediros perdón a todos los que me habéis pedido ser “amiguetes” en Facebook, y que no os hecho caso. Me gusta dejarlo un poco reservado para la gente más cercana, amigos, familia, conocidos, o simplemente aquellos a los que al menos conozco en persona, con los que he charlado aunque sea poco, y con los que en definitiva, he compartido algún ratillo de la vida que me ha tocado vivir. Así que perdonadme por no agregaros de momento. Ya se cruzaran nuestros caminos y le daremos al botón de “aceptar”.

Lo segundo, gracias por todos vuestros comentarios de ánimo. Y por los halagos, pero de verdad que sobran. En esta sociedad enferma en la que vivimos, no debería ser motivo de halago lo que yo he hecho, que no es más que lo correcto y lo normal que debería hacer todo el mundo en estas circunstancias. Lo triste es que sea noticia.

Gracias también por vuestras visitas al blog, que lo tenía un poco abandonado. Ver que llegamos a 2.000 visitas diarias me parece una pasada. Espero que algunos sigáis leyendo mis historietas a parir de ahora, en las que procuraré no tener que hablar más de este triste asunto, y volver a mis batallitas contadas a Velocidad Absurda. Este es un blog en el que contar cuánto disfruto con la vida, y este pajarraco ya no tiene más sitio aquí.

Pero no quería terminar esta entrega por capítulos sin comentar un par de cosas. Por un lado, que ya véis todos lo “malitas” que están las cosas. Si ya somos un poco vaguetes de por sí en este país, la crisis inhumana que vivimos parece que favorece que muchos se dejen llevar por el camino fácil. El de jod. a los demás. Ahora te abren el coche y te roban a la mínima… por una mochila, por unas gafas de sol… No os digo nada ya de las bicis. Cuidarlas, no os confiéis ni les quitéis el ojo de encima ni un segundo. Es triste, pero es así. Ni aunque este pájaro se pase un tiempo a la sombra están seguras.

Y por último, como dice mi amigo Ignacio-, si ya da asco el que roba, más asco da el que compra mercancía robada. Cecilio lo ha comentado en su blog, comprar mercancía robada supone incurrir en un delito de receptación, y está penado con entre 6 meses y 2 años de cárcel.

Y ahora, a dar pedales, que ya va siendo hora…

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