La sombra del fraude electoral masivo planea sobre Venezuela
Las elecciones presidenciales más reñidas de la historia reciente de Venezuela tienen un alto componente de incertidumbre e inseguridad, en la medida en que el presidente Hugo Chávez puede perder el poder. Dirigentes de la oposición y analistas no creen, sin embargo, que el Gobierno pueda orquestar fácilmente un fraude masivo.
22 Septiembre 12 - MADRID - Goyo G. Maestro
El reportero Jon Lee Anderson asegura que Hugo Chávez no cometerá fraude electoral porque el presidente de Venezuela no contempla tan siquiera la posibilidad de perder las elecciones presidenciales del 7 de octubre. Sin embargo, dentro del país latinoamericano, periodistas y politólogos ven plausible una posible victoria de Henrique Capriles, candidato único de la Mesa de la Unidad Democrática para suceder a Chávez después de 14 años de gobierno.
Esta percepción viene marcada, entre otras razones, por los resultados de varias encuestas que sitúan a Capriles muy cerca o por encima en intención de voto del presidente. “El Gobierno tiene miedo, sabe que puede perder las elecciones”, explica a este periódico Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público. La amenaza latente de un posible fraude electoral se baraja en las últimas semanas en diversos foros, a pesar de que algunos expertos en la materia descartan un amaño a gran escala.
Una de las principales teorías conspirativas la ha lanzado el analista político Carlos Alberto Montaner al afirmar que el censo electoral venezolano está inflado con dos millones de presuntos electores inexistentes que, llegado el momento, “votarían” por Chávez. "El fraude se comete en el Registro Electoral. Mientras en la última década la población ha crecido un 14 por ciento, el Registro Electoral lo ha hecho un 58. Ahí se cocina la trampa", escribió recientemente.
Sobre el fraude electoral también se preguntaba Andrés Oppenheimer en su última columna en El Nuevo Herald. Los que conocen bien el sistema electoral venezolano aseguran que es uno de los más avanzados y que un amaño a gran escala es imposible. “Las posibilidades de un fraude el día de las elecciones no son muy altas siempre y cuando la oposición garantice observadores en el proceso”, explica Correa.
Estas serán las primeras elecciones presidenciales de Venezuela en las que los electores usarán la tecnología de la huella digital, que les permite ser identificados antes de votar. Sólo si la oposición no tiene testigos en las mesas electorales el régimen podría manipular los resultados, explica el director de Espacio Público. Por eso, son necesarios miles de voluntarios el 7 de octubre si Capriles quiere asegurarse una jornada transparente. Después de la votación, serán auditadas el 54% de las 39.322 mesas electorales repartidas por todo el país. Si en este punto los supervisores de la oposición detectaran disparidades sustantivas, sería el indicio más claro de que se han producido irregularidades.
Pablo Pérez, gobernador opositor en el estado de Zulia, aseguró a este periódico que no habrá fraude. “Es muy difícil que algo así suceda. No creo que el régimen pueda conocer quién vota en las elecciones por el sistema de voto electrónico. Si así fuera, yo no sería gobernador del estado de Zulia, una región petrolera, que hace frontera con Colombia, a la que Chávez quiere meterle mano desde hace tiempo”.
Miedo e incertidumbre
El gobernador de Zulia esgrime una encuesta realizada hace seis meses que señala que el 44% de los venezolanos piensa que el voto no es secreto. A pesar de la fiabilidad que ofrece el captador de huellas electrónico, la percepción de desconfianza no ha desaparecido. "Es imposible no tener dudas sobre la legitimidad y legalidad de un resultado electoral, cuando unas elecciones presentan, y han presentado siempre, las inmensas irregularidades que caracterizan los procesos electorales en Venezuela", aseguraba en una columna de El Universal Fernando Ochoa.
Entre muchos venezolanos existe miedo e inseguridad por el famoso caso de “la lista Tascón”. Hay que recordar que el Gobierno chavista consiguió que el diputado Luis Tascón hiciera pública una lista en la que aparecían los nombres de cuatro millones de venezolanos pidiendo un referéndum revocatorio contra el presidente, un episodio que el Gobierno utilizó para purgar a los opositores que trabajaban en la administración y cerrar el paso a los que aspiraban a ser funcionarios.
La sombra del fraude sobrevuela la campaña porque Chávez no está sobrado de apoyos como en anteriores consultas populares. Su campaña electoral ha estado salpicada de puntos negros: la explosión de la principal refinería del país (con la muerte de más de treinta personas), el amotinamiento en diversas cárceles, la matanza de indígenas yanomamis, además de los males habituales del país, entre los que cabe citar una inflación desbocada (del 27,6% en 2011, la más alta de América Latina), una violencia creciente (57 muertos por 100.000 habitantes, una de las tasas más altas de la región), un sistema político corrupto (el ex juez Aponte acaba de confirmar desde EE UU que él mismo dirigió una persecución política de opositores ordenada por Chávez).
Los observadores políticos coinciden en que la principal ventaja de Chávez en el proceso electoral estriba en un abuso de poder del espacio televisivo y en el desvío de recursos para financiar actos de campaña, a pesar de que la ley prohíbe a los partidos recibir dinero público para financiar las campañas. Ayer mismo, una cadena obligatoria de radio y televisión del Gobierno interrumpió abruptamente una retransmisión del canal privado Globovisión en la que aparecía Capriles en un acto de campaña. María Corina Machado, una asambleísta de la oposición, explicó en una entrevista con LA RAZÓN en julio haber visto “ambulancias dedicadas a trabajar en actos del partido de gobierno, y autobuses escolares cargados de niños en mítines políticos a la hora del colegio”.
Chávez también confía en las virtudes de sus políticas sociales, con programas que han subvencionado a las capas más pobres de la población, y con su carisma personal, que aún le sitúa como un líder indiscutible entre un importante sector de la sociedad. También usa a discreción la política del miedo. En los últimos días, el presidente ha azuzado a los ricos para que le voten con el propósito de mantener el orden y evitar una guerra civil.
* Nota del autor: Las declaraciones exactas de Jon Lee Anderson realizadas a este periódico son: “Chavez, jamás en la vida, cree que le pueden derrotar en las urnas”. En ningún momento el periodista caracterizó al presidente de Venezuela con la expresión “en el delirio de su vanidad” como se decía en una versión anterior de este artículo.
http://www.larazon.es/noticia/3603-la-sombra-del-fraude-electoral-masivo-planea-sobre-venezuela
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INTERNACIONAL
Delirante reacción de la televisión de Chávez por la exclusiva de ABC
El programa «La Hojilla» ataca al periódico, al que confunde con el grupo Prisa, y le acusa de participar en un complot internacional para desprestigiar al presidente venezolano
ABC.ES / MADRID.Día 23/09/2012 - 20.44h
Delirante reacción de la televisión de Chávez por la exclusiva de ABC
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Chávez moviliza una red de comandos armados para controlar una eventual votación adversa Las informaciones sobre un supuesto plan del chavismo para no reconocer los resultados electorales publicadas el sábado por ABC, que señalan que el mandatario venezolano, Hugo Chávez, estaría «adiestrando a células de 'militantes revolucionarios'» para controlar la situación en caso de que pierda las elecciones del 7 de octubre, han suscitado la ira de la televisión oficial del régimen, la estatal Venezolana de Televisión. La reacción ante la exclusiva resulta, cuando menos, delirante. Mario Silva, conductor del espacio «La Hojilla», llega a confundir a Vocento con Prisa, afirma que hay una especie de conspiración internacional de la prensa privada contra su presidente y llama «fascistas» a periódicos que se expresan libremente.
El presentador, que tiene en sus manos un iPad de Apple donde lee la noticia de ABC -incluso muestra la portada del diario a la audiencia-, asegura que el periódico tiene en su edición digital una «sección exclusiva» dedicada a «tirar basura y bazofia» sobre Chávez. «Esto es un bodrio, una estupidez pero bien grande que evidencia la articulación de los sectores de la ultraderecha en Miami y el grupo Prisa de España, qué grupo más reaccionario de España», asegura literalmente. Hecho un lío, Silva desconoce que ABC pertenece al grupo Vocento. Después, dice que nuestra cabecera participa en un «plan internacional bien orquestado de los medios de información privados» contra Chávez.
Silva utiliza el programa para hacer un llamamiento a «todos los colectivos del país» para «una gran movilización nacional» el día de las elecciones, «para vencer a la ultraderecha, ésta que desde el exterior nos tilda de bandas callejeras, infames y pobretones», dice. El objetivo es «darle una paliza a toda esta cuerda de sinvergüenzas que son auspiciados por diarios como el ABC de Madrid». Además, se refiere a las fuentes del diario, un general que se mantiene en el anonimato para evitar represalias, como «amigos fantasma», con fin de desprestigiarlas. La práctica periodística de no desvelar las fuentes está admitida en cualquier sociedad democrática, pero para el presentador es algo «muy propio de la cadena Fox».
Además, el mero hecho de mencionar la posibilidad de que el líder opositor, Henrique Capriles, obtenga la victoria en las elecciones, es para Silva, sin remilgos, «una basura». Toda una lección de esperpento.
http://www.abc.es/20120923/internacional/abci-delirante-reaccion-television-chavez-201209231902.html
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INTERNACIONAL.Doctor Marquina: «Aunque aparente estar bien, la enfermedad de Chávez se agrava»
ABC entrevista al experto en medicina interna
LUDMILA VINOGRADOFF.Día 23/09/2012 - 09.50h
El médico venezolano José Rafael Marquina, uno de los especialistas mejor informados sobre la enfermedad de Chávez, asegura que es muy engañosa la aparente recuperación de la salud del presidente venezolano. En su opinión, el mandatario está haciendo un inmenso esfuerzo para parecer sano, aunque se encuentre en un estado muy delicado.
–¿Hasta qué punto ha empeorado la enfermedad de Chávez?
–Al presidente se le ve muy mal físicamente, muy débil, está grave, se mantiene a base de esteroides, no tiene coherencia física ni mental.
–Pero por televisión se le ve más o menos bien, incluso canta y baila y la gente duda de si de verdad está enfermo.
–El no poder realizar ningún tipo de actividad pública prolongada demuestra que su salud no va bien. Bajo sus ropas se nota que está escondiendo una bolsa, camina con dificultad.
–¿Exactamente qué parte de su cuerpo está afectada por el cáncer?.
–Al principio tenía metástasis en el hígado y glándulas suprarrenales. Después se especuló que tenía metástasis en el colon, pulmones y problemas en la cabeza del fémur. Cuando hay metástasis, hay fiebre, la fiebre causa sensación de frío, hay que recordar a Chávez en San Félix con bufanda y abrigo. Su capacidad de respuesta para enfrentar los problemas ha disminuido.
–¿Qué tratamiento sigue para mantenerse en pie?
–Es evidente la dosis altísima de esteroides y calmantes, como el fentanilo, que está recibiendo para el dolor. Se los están aplicando tarde en la noche y en la mañana debido a la campaña electoral. Por eso es que siempre aparece en público finalizando la tarde y en la noche.
–¿Entonces no hay problemas para que llegue en buenas condiciones para las elecciones?
–Él va a tratar de llegar bien a las elecciones y, probablemente, hará un cierre de campaña impresionante, muy mediático. Va a impresionar para desvirtuar la idea de que está mal.
–¿Cuándo se presentará el deterioro de su salud?
–El deterioro y la recaída se tendría que a ver a partir de diciembre. La enfermedad continúa progresando, su cáncer es asintomático, los síntomas aparecen cuando ya la persona no responde al tratamiento.
–Su interés es que no parezca que los venezolanos están votando a un Chávez enfermo.
–Estarán votando por un Chávez gravemente enfermo que no está en condiciones de gobernar 6 años más. Su enfermedad ha hecho que la candidatura de Capriles se dispare cuando todo el mundo pensaba que Chávez era invencible.
–¿Ha recibido usted dinero de los cubanos para afirmar que Chávez tenía un cáncer terminal como dice un «anónimo» que trabaja de limpiador en la clínica cubana CIMEQ?
–Esa es una muestra de la desesperación del chavismo y forma parte de su guerra sucia. En EE.UU., donde trabajo, es un delito recibir fondos para ese tipo de cosas y el lavado de dinero es penalizado con cadena perpetua. Tengo una profesión exitosa y gano lo suficiente con mi trabajo.
–¿No ha considerado la posibilidad de que le hayan engañado con los datos que le han pasado sobre la supuesta enfermedad de Chávez?
–Todas las informaciones que me han pasado las he verificado antes de darla al público. Tengo confianza en mis informantes y no me han desmentido hasta ahora.
http://www.abc.es/20120924/internacional/abci-entrevista-doctor-marquina-chavez-201209231906.html
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