jueves, junio 26, 2014

El fracaso de la selección


Hermida Weekend from allmountianmadrid on Vimeo.



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Lo que no se ha contado del fracaso de la Selección

El vestuario estaba dividido desde el principio entre los ‘catalanes’ y el resto. David Villa lloró porque se sintió traicionado por Del Bosque

La selección española acaba de regresar a España tras su dolorosa eliminación del Mundial de Brasil. El combinado nacional llegó tocado a la concentración no sólo física, sino también mentalmente. De hecho, los jugadores no recuerdan un ambiente tan cargado y un vestuario tan dividido. Esto es lo que pasó entre bastidores en la concentración más tensa desde 2006.

Busquets, Diego Costa, Iniesta y Xabi Alonso en el partido contra Chile. Busquets, Diego Costa, Iniesta y Xabi Alonso en el partido contra Chile.


Tras conseguir dos Eurocopas y un Mundial, la selección española ha abandonado Brasil por la puerta de atrás, con un discreto papel en la fase de Grupos de Brasil. Ya en España, los jugadores han trasladado a personas de su confianza algunos detalles de lo que han vivido en la concentración de Curitiba.

El Confidencial Digital ha podido conocer de primera mano el contenido de esos testimonios, que aportan algunas claves que explican el fracaso de la selección.

Un vestuario dividido

Uno de los jugadores más reconocidos y emblemáticos ha reconocido a su llegada a España que “no había grupo, esta vez el vestuario estaba dividido”. Una situación que ya se constató antes del partido contra Holanda, en el que España perdió por cinco a uno. No fue una consecuencia de la derrota.

El jugador lo ha dejado claro a sus familiares: el grupo estaba partido desde el principio. Una de las facciones es la denominada ‘ala catalana’, que integran los jugadores del F.C.Barcelona, exceptuando a Andrés Iniesta. Las relaciones personales de Cesc Fábregas, Gerard Piqué, Xavi Hernández, Jordi Alba y Sergio Busquets con el resto del vestuario no han existido. Había un ambiente “enrarecido”.

Una situación que, tal y como explican ahora, ya se había apuntado en alguna otra ocasión. Pero esta vez, Vicente del Bosque no ha podido arreglar las cosas antes del comienzo de la competición. La facción ‘catalana’ estaba encerrada en sí misma y no se relacionaba con el resto durante el día a día de la concentración.

Al margen de los catalanes, entre el resto del grupo la convivencia tampoco fue muy positiva. “Hubo muchas más discusiones y roces que durante el resto de concentraciones; ha sido una situación única”, explican con asombro desde el vestuario.

El cambio de Villa, un mensaje de Del Bosque

Tras la debacle deportiva han comenzado a surgir voces que insinúan cómo algunos jugadores no estaban satisfechos con Del Bosque.

Uno de ellos es Cesc Fábregas, que tuvo un roce con el seleccionador durante un entrenamiento. Otro es David Villa, con un gesto de grave disconformidad con el entrenador cuando le sustituyó al poco de comenzar la segunda parte contra Australia. “No hombre, no” se leyó en sus labios tras ver su dorsal en la tabla del asistente. Abandonó el campo con desgana y se mostró abatido y cabizbajo en el banquillo.

Una vez finalizado el partido, Del Bosque dijo que entendía el enfado de Villa, mientras explicaba que “no sabía que era su último partido”. El futbolista asturiano no se creyó esa versión del entrenador.

Personas muy próximas al asturiano explican que Villa entiende su sustitución como “una pequeña venganza” de Del Bosque porque el delantero no le había comunicado personalmente que ya no volvería a vestirse de rojo.

Toni Grande es el único que puede evitar la renuncia de Del Bosque

Villa reconoce que, en los días previos, había hablado con el segundo entrenador Toni Grande. Charlaron sobre ‘adiós’ a La Roja que había adelantado en una entrevista en Cuatro. El jugador entiende que entre Grande y Del Bosque no hay secretos (nunca los ha habido), por lo que el entrenador “sabía que me iba” ha confesado el asturiano. Pese a este roce, personas próximas al futbolista aseguran que la relación entre ambos continúa siendo buena.

Del Bosque con un pie y medio fuera

Una de las incógnitas que surge tras la eliminación y las escenas que apuntan a un grupo descompuesto es la continuidad del seleccionador. Vicente del Bosque tiene sobre la mesa una oferta para continuar hasta la Eurocopa de 2016, pero éste ha emplazado a la Federación a “hablar en casa”, en las próximas semanas.

Lo que cuentan quienes conocen de cerca la situación aseguran que Del Bosque valora muy seriamente dejar el cargo. Pero advierten: la clave la tiene su ayudante Toni Grande, que “le ha pedido a Vicente que continúe”.

Según explican estas fuentes, Grande suele tener una influencia determinante en las decisiones de Del Bosque, incluso en las personales. “Es el único que le puede convencer de que se quede” aseguran uno de los 23 seleccionados que acaba de volver de Brasil. Esto va a ser decisivo.

http://www.elconfidencialdigital.com/deportes/contado-fracaso-Seleccion_0_2296570321.html

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