Carolina Marìn doble campeona del mundo consecutiva de badmington,¿ por què ?

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EL TRABAJO PSICOLÓGICO, CLAVE EN SU FORTALEZA MENTAL
El secreto del éxito de Carolina
Pablo del Río, su psicólogo, explica cómo ha conseguido que Carolina Marín se crezca en situaciones adversas.
ALMUDENA RIVERA 17/08/15 - 07:36. 1.9K

Carolina Marin celebra la victoria ante Saina Nehwal FOTO: AFP



Detrás del segundo oro mundial consecutivo de Carolina Marín hay incontables horas de entrenamiento físico pero también mental. Lleva años trabajando junto a Pablo del Río, psicólogo deportivo del Centro de Alto Rendimiento de Madrid, que ha conseguido que la fortaleza mental sea una de sus principales armas en la pista.

Una fortaleza que ha quedado patente en varios momentos claves del Mundial, momentos críticos que pueden hacer al deportista venirse abajo y echar por tierra en cuestión de minutos el trabajo de años.

El primero fue en su debut. Carolina perdió el primer set ante la malaya Jing Yi Tee, que le llegó a endosar un parcial de 8-0. Pero la onubense sacó su garra y dio la vuelta al partido.

Para Pablo era el más difícil porque llegaba a él tras dos meses sin jugar y sin haber podido prepararse como siempre debido a una fractura por estrés en el quinto metatarsiano del pie derecho. Una cosa sumada a la otra había generado un problema de desconfianza en la propia Carolina.

PABLO DEL RÍO
"Por su lesión ha estado haciendo tres sesiones de práctica imaginada al día"
"La preparación durante este último mes fue completamente atípica. Estuvo 12-14 días sin entrenar a nivel físico. Tras reunirme con Fernando, su entrenador, decidimos que entrenase con técnicas encubiertas en las que había mucho de entrenamiento mental, de práctica imaginada a nivel táctico y técnico. Ha estado haciendo tres sesiones de práctica imaginada al día. Hemos preparado a cada adversario a nivel estratégico y como la lesión era en el pie, ha llegado a entrenar sentada en el plinto o sobre una bola grande de las de pilates", explica Pablo. "Tuvimos que trabajar para hacerle ver que esa forma de entrenar iba a ser igual de efectiva", añade. Y lo fue.

Otro de los momentos más delicados del Mundial fue en la semifinal ante la coreana Sung. La española había ganado la primera manga y perdido la segunda, pero en la definitiva Sung se puso 13-8 por delante. Entonces volvió a llegar la reacción y Carolina le endosó un parcial de 10-0 para acabar llevándose el partido y con él un billete a la final.

"Mentalmente está preparada para eso. Es consciente de que todos los volantes hay que pelearlos. Se crece porque sabe lo que tiene que hacer y si ella mantiene el autocontrol, las situaciones adversas las percibe como neutras", explica Pablo. "Si hace lo que ha trabajado es invencible", añade.

PABLO DEL RÍO
"Si hace lo que ha trabajado es invencible"
En su preparación no se deja nada al azar. El psicólogo trabaja mano a mano con Fernando Rivas, el entrenador, y juntos han dado forma a una campeona.

"El mérito es de ella", dice con humildad Pablo, la misma que trata de inculcar a todos sus deportistas. "Carolina es humilde y nunca perderá la humildad. Es un valor fundamental en el deporte pero sobre todo en su vida. Es importante para que transmitan y lleguen a la masa social", agrega.

Pablo se siente muy orgulloso de Carolina. La ha visto crecer y madurar desde que llegó al CAR de Madrid con 14 años y la considera "como una hija". El cariño y respeto es mutuo. A él fue a la primera persona que llamó nada más conquistar su primer Mundial hace un año y este domingo volvió a ser uno de los primeros en hablar con ella. "Estaba feliz porque le había llamado el Rey para felicitarla", cuenta Pablo, que ha estado en contacto con ella a lo largo de todo el Campeonato por whatsapp, email y llamadas.

El último mensaje que le mandó la noche anterior a la final decía lo siguiente: "Compite para ganar sin que el resultado sea un motivo de presión. A partir de ahí yo solo tengo que esperar y tú actuar".

La conoce tan bien que en cuanto saltó a la pista ya sabía que era su día. "Sabía que estaba relajada por su forma de andar, de moverse, por cómo miraba a Fernando, cómo celebra cada punto...".

PABLO DEL RÍO
"Llegamos a trabajar lo que tiene que hacer entre punto y punto"
Preparación minuciosa durante años
Porque eso también forma parte del entrenamiento de Carolina. "Trabajamos cómo resolver situaciones adversas y así es como se ganan Campeonatos. Esas miradas, gestos y gritos son formas de intimidación. ¿Viste cómo reaccionaba la india?", reflexiona.

Todo está estudiado, medido, trabajado, incluso qué tiene que pensar entre cada punto. "Llegamos a trabajar lo que tiene que hacer entre punto y punto. Los árbitros le llaman la atención. Tiene que pensar qué hacer, en qué ha fallado. Hace una evaluación rápida in situ del punto anterior", explica.

CAROLINA MARÍN
"Yo quiero ser la mejor en todo"
Fernando y él diseñan un plan A de cómo ganar a cada rival pero también un plan B. Antes iba más de tapada, ahora que la conocen hay que hacer cosas nuevas. Este año ha mejorado el paralelo y el revés.

Hace dos meses, antes de la lesión, Pablo le preguntó si quería ser campeona del mundo y pasar a la historia o seguir trabajando y mejorando. La respuesta de Carolina fue: "Yo quiero ser la mejor en todo". Y esa frase se la imprimió para recordársela.

Porque otra de las cosas que trabajan es el refuerzo positivo. 'Puedo porque pienso que puedo' es el lema de la onubense, lema que ha tomado prestado de Pablo.

"Ser ganadora es una actitud que se entrena, todo se entrena en esta vida. Las medallas se ganan en los entrenamientos, a las competiciones se va a recogerlas. Carolina la ha ganado en el día a día del entrenamiento", dice.


http://www.marca.com/2015/08/17/mas_deportes/otros_deportes/1439789764.html





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UN INGENIERO ONUBENSE LOGRÓ QUE EL PÚBLICO DEL ISTORA SENAYAN SE VOLCASE EN EL APOYO A CAROLINA
El mejor aliado de Carolina Marín
"El público local nos apoyó. Aquí se quiere mucho a Carolina"
FERNANDO CARREÑO 17/08/15 - 13:22. 49


Apenas acabó la final entre Carolina Marín y Sania Nehwal, la flamante bicampeona del mundo cruzó la pista del Istora Senayan y entregó la raqueta con la que había sido ganadora a una persona en la grada. No le conocía personalmente pero pese a toda la concentración que le había sido precisa en la pista en semifinal y final, había percibido su papel como líder del grupo que levantó al pabellón en su apoyo.

Javier Jaramillo Rollán es ingeniero, onubense y reside en Yakarta, donde trabaja para una multinacional de telecomunicaciones. Al saber que el Mundial de bádminton se celebraría en esa ciudad y que la gran favorita era su paisana, no dudó que debía estar presente. “Que la número 1 del mundo sea de Huelva es un orgullo para todos nosotros. Era obligatorio verla, estar allí para darle ánimos”.

Así, se vistió con su camiseta del Recre para que Carolina pudiera identificar a un paisano en la grada —“que vea que ahí había otro de Huelva”—, reunió a otros cuatro españoles y un venezolano, y provistos de banderas y camisetas rojas llegaron al Istora. Las entradas, a 250.000 rupias para semifinales y final. Al cambio, 17 euros. “Puede parecer barato, pero el poder adquisitivo en Indonesia no es grande. Sin embargo, aquí existe pasión por el bádminton y la gente ha ahorrado para poder asistir al Mundial”.
De hecho, el pabellón ya estaba lleno cuando llegaron. “Íbamos a Zona 1 y salvo los VIPS y la preferencia, el pabellón no estaba numerado, así que te sentabas donde podías. Pero sí es cierto que aquí se quiere mucho a Carolina. Cuando entramos, una chica de Indonesia, que llevaba una camiseta con la cara de Carolina y nos identificó como españoles, nos hizo sitio en su zona y estuvimos en buen sitio en la final”. Así, el grupo creció con algunos indonesios, chinos y un par de franceses.

Él éxito fue absoluto porque en semifinales y final —no fueron a las rondas previas por sus compromisos laborales— arrastraron al pabellón. “Gritábamos el nombre de Carolina, el Sí Se Puede, España, A por ella, también ¡¡Vamos, choquera!!, que es como nos llamamos los de Huelva de modo cariñoso... y el público local nos apoyaba. En la final había muchos indios, pero pudimos callarlos. Fue todo un espectáculo”.

No se esperaba que Carolina le distinguiese de ese modo. “Fue un momento increíble y bueno, esta raqueta la voy a guardar toda mi vida en un lugar preferente”.



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