domingo, febrero 21, 2010

oro bode ? sì en la combinada!


JJOO VANCOUVER | Su última oportunidad: Domingo en la supercombinada
La quimera del oro del 'salvaje' Bode Miller
Bode Miller, plata en el supergigante, aún no ha logrado un oro olímpico. (AFP)

* Plata en el supergigante, tiene en la supercombinada su última oportunidad de lograr un oro olímpico
* Sostiene que el 'dopaje' es una consecuencia de la 'presión inhumana que sufre el deportista': 'Si ganas eres un símbolo; si pierdes, una sombra fracasada'

DPA | VANCOUVER
Actualizado sábado 20/02/2010 18:06 horas


Pocos como él, quizás ninguno: Bode Miller, el 'esquiador salvaje', el hombre hecho a sí mismo que no negocia ni con la nieve ni con el poder del deporte, tiene la oportunidad de coronar su carrera con una medalla de oro en los Juegos Olímpicos. Si lo logra en la supercombinada de Whistler, habrá ganado más que un oro: le habrá ganado a todos.

"Creo que el deporte debería ser un placer privado", dijo hace cuatro años en la recta final a los Juegos de Turín 2006, aquellos en los que brilló en las noches y las discos mientras fracasaba en las pistas de Sestriere. Cuatro inviernos más tarde, ya con 32 años sobre sus hombros, Miller está cerca de cerrar con gloria una carrera fascinante. Y lo más importante para él: lo está haciendo como él quiere, lo está haciendo en sus términos.
Criado al estilo hippie

"Yo disfruto esquiando de una manera determinada. Ojalá eso me lleve a medallas, aunque durante mucho tiempo sólo me llevó a caídas y decepciones", dijo tras ganar la plata en el supergigante del viernes en Vancouver 2010. "Lo más importante que puedes celebrar es a ti mismo, celebrar lo que eres", añadió Miller, criado sin electricidad, teléfono ni agua corriente en las montañas de New Hampshire, el sitio al que Woodye y Jo, consecuentes "hippies", llevaron hace tres décadas a sus cuatro hijos.

La plata del supergigante y el bronce en el descenso relanzaron la carrera del dos veces campeón de la Copa del Mundo, un hombre que hace apenas cinco meses estaba tan cerca del esquí como Whistler de Nagano, unos Juegos en los que nadie lo conocía. "Disfruté mucho, hacía lo que quería". Fue en Salt Lake City 2002 donde ganó con sendas platas en la combinada y el slalom gigante sus primeras medallas olímpicas. Ocho años después nadie lo esperaba subiendo otra vez a los podios de los cinco anillos entrelazados.

"En septiembre tenía cero chances de estar en los Juegos. Cero. No había esquí, ni entrenadores, ni técnicos, ni nada", confesó. "Paseaba por la playa con mi hija, iba todo el tiempo en chancletas, que son mucho más cómodas que las botas de esquí, jugaba al golf... No fue una decisión fácil volver a levantarse cuando está oscuro y salir a que el viento frío te pegue en la cara".

Pero Miller, un "armario" de 188 centímetros y 92 kilos que esquía con una potencia y un riesgo fuera de lo común, dando forma a un estilo más que personal, decidió que quería volver. "La diferencia entre Turín y Vancouver es que esta vez quería ganar medallas, y en 2006, no", explica con la misma franqueza con que ataca la pista. Sus ojos celestes no pestañean, parece absolutamente convencido de que las cosas son como él cree que son.

Y la prensa lo adora, porque siempre garantiza una buena historia. Desde confesar que más de una vez esquió borracho a criticar ácidamente por "humillantes" los controles antidopaje. Sus respuestas reciben incluso aplausos de periodistas, curiosamente más de una vez en el centro de sus críticas.
'De la presión inhumana nace el dopaje'

"El deporte nace limpio, por el mero placer de participar, pero luego intervienen los fans y los medios para corromperlo con la presión. El que no es fuerte queda apartado en una esquina, abandonado en la fría sombra, y el que vence se convierte en un símbolo. La notoriedad es un veneno", dijo en 2006 Miller a 'La Gazzetta dello Sport'. "De esa presión inhumana nace el dopaje, por el imperativo de tener que ser el primero".

Quizás cumpla mañana con ese imperativo. Si lo logra, no sólo se consolidará como el esquiador más exitoso de la historia olímpica estadounidense: también tendrá toda la paz y la confianza para encarar su próximo desafío, el de confirmar que sus años de campeón juvenil de tenis no están tan lejanos y ganarse en agosto un lugar en el Abierto de Estados Unidos.
http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2010/02/20/masdeporte/1266684338.html
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el americano demostró su superioridad
Bode Miller se proclama campeón de combinada

* · Consigue su tercera medalla en otras tantas pruebas disputadas · Aventajó en 33 menos que el croata Ivica Kostelic, que capturó la medalla de plata

EFE. Whistler (Canadá) 21/02/10 - 22:10.


El estadounidense Bode Miller se proclamó campeón olímpico de combinada de esquí alpino de los Juegos de Vancouver, tras imponerse en la prueba disputada en Whistler.

Miller cubrió el recorrido -una manga de descenso y otra de eslalon- en un tiempo ganador de dos minutos, 44 segundos y 92 centésimas, 33 menos que el croata Ivica Kostelic, que capturó la medalla de plata.

En tercera posición concluyó el suizo Silvan Zurbriggen que obtuvo el bronce, con un tiempo de dos minutos, 45 segundos y 32 centésimas, y completó el podio en la prueba mixta del esquí alpino.

Miller logró de esta forma el único título que le faltaba en su brillantísima carrera deportiva y la tercera medalla en estos Juegos -después de la plata en el supergigante y el bronce en el descenso-, en los que está siendo el rey en el esquí alpino.

http://www.marca.com/2010/02/21/mas_deportes/jjoo_invierno/1266786627.html

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