vaya par de gemelas

Tráfico de bebés | Un posible reencuentro
51 años para volver a nacer y encontrarse
María José y Vicki se someterán a las pruebas de ADN. | Archivo familiar


Vicki vive en el Páramo, nació en la Maternidad en 1959 y busca a su hermana
María José vive en Valencia y vio el rostro de Vicki en el periódico
Fue como mirarse en un espejo...

Sarah Aller | León
Actualizado martes 10/05/2011 11:38 horas


51 años después de venir al mundo, los caminos de Vicki y María José podrían unirse para siempre. Una vive en Santa María del Páramo. La otra en Valencia. Y las dos comparten el mismo físico, muecas idénticas, gestos... Nacieron con un mes de diferencia, según las partidas de nacimiento. Y un reportaje publicado el pasado 12 de abril en EL MUNDO DE LEÓN sobre la trama de bebés robados las puso en alerta.

En León alguien buscaba a una gemela.... Y en Valencia alguien vio aquellas fotos y sintió que se miraba en un espejo... Están a la espera de practicarse las pruebas de ADN, que serán las que determinen finalmente si son hermanas y alguien las separó al nacer.

Su historia se parece a la de decenas de hermanos que se están encontrando décadas después de que alguien en el paritorio les asignara caminos distintos. Vicki lleva varios meses buscando a su hermana gemela, una criatura idéntica a ella que nació en la vieja Maternidad de León en agosto de 1959. En su casa siempre sospecharon que aquel bebé no murió tras el parto. La oyeron llorar nada más nacer y después nadie les permitió ver su cuerpo sin vida. Aquel día, sus padres, Pilar y Marcelino, regresaron a casa sin un solo certificado que demostrase que allí se dio a luz unas gemelas y con el pálpito de que la vida se la jugó.

Años después y a cientos de kilómetros de este hogar, una joven valenciana de 19 años descubría que había sido adoptada. Desde entonces ha buscado a su familia sin éxito. Hasta que hace dos semanas vio a una mujer en el periódico. Una gota de agua...

La historia de ambas la cuenta Deborah, hija de Vicki, que desde hace varios meses se ha convertido en el eje de toda esta historia. Ha rebuscado en archivos, ha cursado peticiones para hacerse con documentación... Todo con la intención de devolverle a su abuela Pilar una hija y a su madre Vicki una hermana. Y podría haberlo conseguido.

La mujer valenciana en la que ahora se posan los ojos de esta familia de Santa María del Páramo podría ser realmente Hada, la niña que perdieron. Deborah no puede evitar referirse a ella como su tía. "Se enteró a los 19 años de que era adoptada. Su madre murió hace 10 años y su padre tiene 94 y no quiere decirle nada de todo esto. Ellos nunca quisieron hablar del tema. Sólo que la cogieron de un orfanato de Valencia capital. Siempre fue un tema tabú". Movió cielo y tierra para encontrar papeles que la condujeran a su verdadera familia. En el Hospital provincial de Valencia, en el Archivo Histórico... Sólo consigue el papel de la adopción, donde curiosamente ya figura el nombre de su madre adoptiva, algo inusual en bebés que se han entregado.

Su marido ha sido su gran ayuda. Ha buceado en internet infinidad de veces buscando pistas, más aún desde que se hiciera pública la trama de bebés robados. Hasta que encontró el reportaje de este periódico. "Cuando mi tía vio la foto de mi madre y de mi abuela se echó a llorar. ¡Cómo me parezco!, gritó. Llamó al Ayuntamiento de Santa María del Páramo y un policía local fue a buscar a mi madre a la tienda...". A partir de ahí todo se nubla y se torna en lágrimas. "No puedo respirar", repetía Vicki. Varias fotos cruzadas y horas de conversación telefónica llevan a lo inevitable. María José coge el tren y se planta en León. "En el andén la esperaban mi abuela, mi madre y mi tío. Sólo con mirarse entre ellos se echaron a llorar... Es que no sé cómo explicarte todo esto con palabras". Su risa, dicen todos en el pueblo, es idéntica. El ADN lo determinará...


http://www.elmundo.es/elmundo/2011/05/10/leon/1305020306.html