Kiwizibidaia from Mikel Bringas on Vimeo.
Es el viaje que acaban de hacer Mikel y Rosa con sus hijos, Eki y Lur, de cinco y dos años a Nueva Zelanda. Tres meses: noviembre, diciembre y enero pasados. La familia Bizibidaia, de San Sebastián, nos tiene acostumbrada a sus viajes en bici por el País Vasco o por Europa, pero éste es la repera. A Mikel y Rosa se les nota en la voz la emoción de saber que acaban de hacer algo grande: uno de los viajes de su vida. “Nos lo podíamos montar con los trabajos, los niños están en una edad en la que podían faltar a la escuela, teníamos algo de dinero ahorrado y además ganábamos tres meses de verano al invierno de aquí” explica Mikel por teléfono. Él trabaja para la administración vasca en cuestiones de deporte. Rosa es comadrona.
Como da cuenta su web, los Bizibidaia han pedaleado por todo el mundo. Antes de tener niños lo hicieron con un tándem por Cuba, Costa Rica o el Sudeste Asiático. Llegó Eki y se incorporó a los viajes en un remolque. Con Lur, Eki pasó al tándem que comparte con su padre, y la niña al remolque. Con los años han aprendido a reducir el equipaje, pero viajan como siempre: alojándose en campings y esta vez también plantando la tienda en granjas o en casa de familias de la Warm Shower List, la red de alojamiento para cicloturistas.
Mikel y Rosa se toman los viajes con calma. No pedalean más de dos o tres horas al día e intentan aprovechar las siestas de los críos. “Nunca se han quejado, pero tampoco queremos forzarles. El 80% del tiempo van dormidos y cuando se despiertan vamos charlando o comentando lo que vemos”. Kilómetros de costa llenos de leones marinos, ballenas, delfines, acantilados, glaciares, pingüinos, montañas nevadas, palmeras, cascadas, vacas… yo no me canso de ver el vídeo. Me encanta la imagen de las sandalias con calcetines de Eki pedaleando con un chandal rojo con un parche de los que se planchan. O la de Lur sonriendo al lado de su muñeca. Cuando se viaja con niños es tal cual. La voz de Dolores O’Riordan de The Cranberries añade toneladas de emoción a las imágenes.
Eki y Lur han crecido mucho durante el viaje, aseguran sus padres. Se han vuelto más autónomos, han compartido su tiempo con un montón de gente y tienen una relación más estrecha y juegan más juntos. “La bici tiene valores educativos que son muy positivos: te mueves gracias al esfuerzo –los pedales de Eki empujan igual que los de su padre--, en el camping tienen que ayudar a montar y desmontar, a fregar cacharros, y un viaje obliga también a resolver complejidades, tomar decisiones y poner límites a lo material, cosa que en casa es difícil”, cuenta Mikel. Por ejemplo, frente a la multitud de juguetes que hay en casa, los niños saben que de viaje solo se pueden llevar los cuentos y juguetes que caben en una alforja.
De lleno en la edad en la que Eki está aprendiendo a leer y escribir, su maestra y los padres acordaron que durante el viaje mandaría postales a sus compañeros y además se llevaron algunas fichas. “Han sido días enteros al aire libre, de playa y montaña, con un paisaje alucinante, súper buen tiempo, los cuatro juntos… Era un destino que estaba allí, como esperando. Que nos quiten lo bailao”, remata Rosa.
Bizibidaia es un juego entre las palabras bici, vida y viaje. Mikel dice que significa algo así como “el viaje de la vida en bici”. Ya está pensando en el siguiente. La vuelta a España por etapas y compartiéndolas con otras familias. Bizibérica, han bautizado el invento. Creo que todavía no está en la web, pero vale la pena entrar para ver el resto de viajes.
http://blogs.elpais.com/mamas-papas/2011/03/tres-meses-dos-bicis-dos-ni%C3%B1os-y-a-nueva-zelanda.html
1 comentario:
Gracias Cecilio por el comentario, genial que te haya gustado
un abrazo
mikel
www.bizibidaia.net
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