marta dominguez absuelta

INVESTIGACIÓN | 'Operación Galgo'
Marta Domínguez, exculpada de tráfico de sustancias prohibidas



Pablo de la Calle | Luis Fernando López | Madrid
Actualizado miércoles 20/04/2011 12:21 horas



Ni la Agencia Española del Medicamento, ni la Agencia Estatal Antidopaje ni el laboratorio de Colonia han podido probar que Marta Domínguez haya traficado con sustancias dopantes. Al contrario, todos han certificado que aquel bote que la deportista hizo llegar al también atleta Alberto García no tiene nada que ver con la trembolona, la testosterona ni la nandrolona, los componentes prohibidos que la Guardia Civil había barajado como posibles.

Los análisis negativos en todos los laboratorios han llevado a la juez de la 'operación Galgo', Mercedes Pérez Barrios, a archivar el caso. Marta Domínguez, campeona del mundo de 3.000 metros obstáculos, queda exculpada de la principal acusación de dopaje que existía en su contra.

El supuesto delictivo nace de una comida que la atleta mantuvo con su agente, José Alonso Valero, el 17 de noviembre de 2010. En aquel encuentro, ella entregó a su representante un vial de color marrón y cabezal dorado para que se lo hiciese llegar a Alberto García. Previamente, los dos deportistas habían acordado el intercambio después de algunos llamadas y mensajes en los que hablaban de 'oro' y 'ron'.

En esas comunicaciones y en esos términos, la Guardia Civil entendió que se escondía una jerga de dopaje para ocultar una sustancia prohibida. Por eso, aquel 17 de noviembre montaron un dispositivo para grabar la entrega del 'oro' de Marta a Alonso Valero y después interceptaron el vehículo de éste para comprobar que llevaba el 'oro' consigo.

Sin embargo, no lo intervinieron, a la espera de que Alberto García lo recogiese en casa de Alonso Valero. Posteriormente, los agentes requisaron ese vial en el registro del domicilio del atleta, el 9 de diciembre, el día que se desencadenó la 'operación Galgo'.

La Guardia Civil creyó tener un caso cerrado de tráfico de productos dopantes. Sin embargo, la hipótesis falló por la naturaleza del 'oro'. Marta Domínguez siempre mantuvo que se trataba de un recuperador muscular legal que compró en Estados Unidos y que está a la venta en los herbolarios españoles como cobre-oro-plata. Mientras, la Guardia Civil sostenía que el 'oro' era trembolona, de acuerdo a la declaración inicial de Alberto García, que así lo había afirmado en el primer interrogatorio, aunque después se desdijo ante la juez. Los diferentes análisis han venido a confirmar que Alberto dijo la verdad a la segunda y que Marta nunca mintió, lo que ha conducido a su exculpación en ese caso concreto de tráfico de sustancias prohibidas.

Aún pesa sobre ella otro asunto relativo al dopaje, aunque es probable que acabe teniendo el mismo desenlace: el archivo. A la atleta se le imputa por dopar a un compañero de entrenamiento, Edu Polo, un atleta de 44 años que ni siquiera tiene ficha federativa. Además, tanto Marta como Edu han certificado que el tratamiento fue por iontoforesis, una técnica permitida hasta el punto de que la propia Federación se la recetó a Marta Domínguez para curarse una lesión el pasado año.
http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2011/04/20/masdeporte/1303254232.html
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ATLETISMO | 'Operación Galgo'
El día que Marta dijo las verdades


En su entrevista desde el inicio de la operación Galgo, publicada por EL MUNDO el 26 de enero, ofreció una versión que la justicia ha tenido que asumir como buena para declararla inocente
En declaraciones a Pedro J en VEO 7 declaró que creía en su inocencia

Pablo de la Calle | Luis Fernando López | Madrid
Actualizado miércoles 20/04/2011 16:44 horas


Marta Domínguez ha recuperado parte de la dignidad birlada por la Justicia. La magistrada que durante cuatro meses mantuvo contra ella una imputación por tráfico de sustancias prohibidas ha admitido ahora la inconsistencia de ese proceso contra la mejor atleta española de la historia. La juez archiva esa parte del caso después de recibir los análisis de diferentes laboratorios que niegan que fuese un producto dopante aquello que Marta hizo llegar al también atleta Alberto García. Triunfa la versión que la palentina ofreció en su única entrevista tras la redada policial.

26 de enero. Ese día, EL MUNDO publicaba una conversación con Marta Domínguez. Cuatro páginas de preguntas y respuestas. En aquel diálogo, ella trató de desmontar cada imputación, y mucho más: los daños a su imagen. Para el gran público, la atleta era el paradigma del tramposo.

En las horas que siguieron al inicio de la 'operación Galgo', el 9 de diciembre, se dijo que ella tenía en casa de todo (y malo), que se había dopado por tierra, mar y aire, que había traficado con productos dopantes, que había vídeos donde aparecía inyectándole a otros atletas, que había blanqueado capitales porque el negocio del dopaje era de alta rentabilidad... Todas aquellas filtraciones quedaron en dos únicas imputaciones por delito contra la salud pública: una por entregar un vial con un producto supuestamente dopante a Alberto García y otra por tratar, supuestamente con un producto dopante, a un compañero de entrenamiento.

La primera de las acusaciones ya es cadáver, lo que revaloriza aquellas palabras del 26 de enero.

Pregunta.- Se le imputa por tráfico de sustancias prohibidas, por un bote de 'oro' que usted le dio a su agente y éste habría pasado a Alberto García. ¿Qué es el oro?

Respuesta.- El oro es oro, un oligoelemento que ambos compramos en una tienda de productos naturales, en Nueva York, en 2006, durante unas vacaciones. También se puede adquirir en España, aunque lo venden como cobre-oro-plata [Labcatal-5]. Alberto y yo hablamos y me preguntó si tenía oro, de aquel oro, digo yo.

P.- ¿Y por qué toman oro?

R.- Es un recuperador muscular. Y es antidepresivo. Por eso lo compré en su momento. El problema es que la Guardia Civil piensa que hablamos en clave. Y no. Compré tres botes en Estados Unidos, por eso me quedaba. Y Alberto compraría otros tres, pero no debía tener ya. Nos costarían unos 10-12 dólares.

P.- La Guardia Civil fotografió el momento en el que le daba un sobre a su agente y confirmó que en el sobre contenía el oro. De hecho, paró vuestro coche. ¿No sospechó?

R.- Le mandaron bajar del coche y abrir el maletero. A mí me dijeron que no bajase. Tampoco pensé nada raro; estaban parando a otros. Si en el sobre hubiese algo prohibido, lo lógico sería ordenarle a Alonso Valero, mi representante, que lo tirase, porque los agentes no lo requisaron.

P.- El mismo día que Alberto le pide oro, usted le manda un sms diciéndole que tiene para él «media botella de ron». Para la Guardia Civil, oro y ron son lo mismo. En el sumario se puede leer: «Obtenemos [del registro del coche de Alonso Valero] un vial de color OPACO en su cuerpo exterior y con un cabezal de aluminio color ORO. Resulta significativo que este vial estuviera medio lleno (media botella de ron)».

R.- ¿No está permitido el ron?, ¿está prohibido el alcohol? Seamos serios. El problema es que, para la Guardia Civil, siempre hablo en clave de productos prohibidos. No. Si hablo de oro es oro y si escribo «botella de ron» es ron. César, mi entrenador, estuvo en Venezuela este verano y me trajo una botella. Por eso, supongo, le dije a Alberto, en broma: 'Tengo media botella de ron para ti', aunque ni me acuerdo del sms. A partir de eso, los investigadores concluyen que el ron es el oro y que el oro es algo prohibido. Yo pregunto: ¿tenéis el oro? [cuando se realizó la entrevista no estaba claro que lo hubiesen requisado en casa de Alberto García el día del registro en su domicilio]. Analizadlo, es producto natural.

P.- Alberto dijo que el oro es trembolona, una sustancia prohibida.

R.- Bueno, no sé si diría eso a la Guardia Civil, pero ante la juez, como testigo, obligado a ser veraz, dijo que es un producto natural.

P.- ¿Y qué dice la juez?

R.- Que el oro debía ser dopante, aunque yo intenté corregirle. Le comenté: 'No sé qué dice Alberto, pero lo que le di no era dopante, es un producto natural'. Ésa es la verdad.

La juez mantiene en estos momentos otra imputación por una delito contra la salud pública, por haber administrado, supuestamente, un tratamiento prohibido a un compañero de entrenamientos. Y la acusación tendrá el mismo final, el archivo, si la explicación de Marta Domínguez resulta tan cierta como ha demostrado ser en el caso del 'oro'. Sobre esa parte del proceso, Marta Domínguez era concluyente en la entrevista de EL MUNDO.

P.- ¿Dopó usted a Edu Polo?

R.- Edu es mi liebre, quien tira de mí [quien marca el ritmo] en los entrenamientos. No compite ni en carreras populares. Ni le pago. Es mi amigo. ¿Cuál fue el problema? Se lesionó en junio y seguía mal después del verano. Y entonces le dije: 'Por qué no hablas con mi fisio o con tu médico para saber si te iría bien el tratamiento que me puso a mí la Federación, de Fortecortin y Scandinibsa por iontoforesis.

P.- La Agencia Estatal Antidopaje dice del Fortecortin que está «prohibido en competición».

R.- Está permitido siempre por iontoforesis, porque no entra directo sino por la piel. La liebre siguió un tratamiento que a mí me autorizó la Federación, y por eso estoy imputada. Edu fue a su médico, tiene sus recetas y compró los productos. Yo, no.

P.- ¿No es raro que fuesen juntos a la clínica, sin estar el fisio?

R.- El fisio, Manu, es muy amigo nuestro. Ese fin de semana estaba fuera, haciendo un curso, y nos dejó las llaves. Simplemente.

P.- Pero los agentes mantienen que usted se lo inyectó a él.

R.- La juez me preguntó si algún día fui yo a pinchárselo. Creo que le acompañé los 10 días de tratamiento, pero no se pinchó. Se ponía unas esponjillas y a través de una máquina la medicina pasa a la piel.

P.- ¿Usted no tocó una jeringa?

R.- El producto viene en un vial y para sacarlo... Si se intenta verter cae muy poco y suele sacarse con una jeringa para ponerlo en la esponjilla. Luego hay que ponerse los dos electrodos y taparlos con una venda para sujetarlos, y yo ayudaba a mi amigo ajustando la venda. Dos cosas: no le administré nada y es imposible que le pinchase, como se me acusa.

P.- ¿Por qué es imposible?

R.- Hay que saber qué son las infiltraciones. No se pueden hacer 10 pinchazos en 10 días. Como mucho se hace una vez al mes, porque, si no, el tendón se podría secar. Se me acusa de un delito contra la salud pública por estar ayudando a un amigo a recuperar la salud.

Para Marta Domínguez, su inclusión dentro de la operación se debe al interés de la Guardia Civil en dar altura mediática al asunto. "Si en esto no estuviese yo, sino otra persona con menos gancho, hubiera tenido menos trascendencia. Quizá tenía que caer alguien que pesase mucho para que esta operación se sustentara". Y, según ella, tampoco le había ayudado su conocida vinculación al PP: "Eso me ha perjudicado. Cuando te decantas y has sido concejal... Si lo sufrí hace años, ahora que han podido resarcirse, lo aprovecharon. Me siento una víctima política. Aquí en Palencia me han llegado a insultar cuando iba entrenando".

La atleta se mostró granítica durante toda la entrevista, realizada sin limitaciones temporales ni de contenido. Transmitía un convencimiento extremo en su triunfo judicial, aunque daba casi por perdida la lucha por recuperar su buen nombre, algo más limpio hoy que ayer.

http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2011/04/20/masdeporte/1303298682.html



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