Giro de Italia
Segundo triunfo consecutivo y liderato para el alemán
Kittel se viste de rosa
El joven navarro Julen Amézqueta, en la escapada del día, fue durante gran parte de la jornada líder virtual del Giro de Italia
Enrique Bernaola
Actualizado 08/05/2016 20:10 CET
Marcel Kittel volvió a demostrar que es el mejor esprinter del mundo y se hizo con la tercera etapa del Giro de Italia, la segunda consecutiva en su cuenta personal. El del Etixx volvió a no tener rival en el esprint final de una jornada entre Nijmegen y Arnhem, la última en territorio holandés, y se convirtió en el nuevo líder gracias a las bonificaciones.A falta de saber si será capaz de terminar el Giro, Kittel ha demostrado ya que es el amo y señor de las llegadas masivas en esta edición. Su enorme potencia sobre el pedal está un peldaño por encima de la del resto, que nada pueden hacer por intentar siquiera incomodarle. Si a eso se le une que cuenta con un equipo sensacional para preparar este tipo de etapas, el triunfo está garantizado. Jungels hizo el último trabajo de acercamiento y Sabatini, que para eso se le fichó, lanzó al misil alemán para que 'sólo' tuviera que rematar la faena.La jornada fue casi calcada a la anterior, con una etapa holandesa muy llana y una escapada del día que por momento pareció intimidar las opciones de los velocistas. En esta ocasión la fuga estaba formada por Amézqueta (Wilier-Southeast) y Van Zyl (Dimension Data), y Tjallingii (LottoNL-Jumbo) y Berlato (Nippo-Vini Fantini), que repetían en la escapada buena como en la segunda jornada. Los cuatro se entendieron a la perfección para molestar a un pelotón que por momentos llegó a pasar apuros.Más aún cuando en la fuga estaba Amézqueta, el joven ciclista navarro que durante gran parte del día fue el líder virtual de todo un Giro de Italia al estar a apenas 45 segundos de Tom Dumoulin. Un sueño que llegó a parecer posible pero del que finalmente tuvo que despertar al ser neutralizado en los kilómetros finales. Más se resisitó Van Zyl, que intentó hacer la guerra por su cuenta y cerca estuvo de dar la campanada. Sin embargo, los intereses atrás eran muy grandes, casi tanto como el nerviosismo que provocó diferentes caídas que anularon las opciones de victoria de esprinters como Demare o Arndt.Cazado Van Zyl a poco más de un kilómetro para la meta, el pelotón se dirigió enfilado a intentar soprender a Kittel, pero fue inúltil. Sabatini hizo un trabajo espectacular apretando el ritmo hasta la recta final y Kittel redondeó la jugada. Segundo triunfo del alemán en esta edición (cuarto en su historial del Giro tras las dos de 2014) y ahora, además, 'maglia' rosa como nuevo líder de la general en el día antes de la primera jornada de descanso que servirá también para que el circo ciclista se traslade, ya por fin, a territorio italiano.
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