domingo, agosto 21, 2016

Maratòn de rìo gana Kipchoge (Kenia),en 2:08:43 2º Lilesa (Etiopía) , 3º Rupp (Estados Unidos), castillejo top 50


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Se cae en la meta del maratón y se pone a hacer flexiones
El estadounidense Meb Keflezighi patinó justo cuando llegaba al final de la carrera y se lo tomó con tanto humor que se puso a hacer ejercicio


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El último ganador de una Maratón olímpica masculina fue el ugandés Stephen Kiprotich con un tiempo de 2 horas, 8 minutos y 1 segundo en Londres 2012. Detrás llegaron los keniatas Abel Kirui (Kenia) que fue medalla de plata (2:08:27) y Wilson Kipsang Kiprotich (2:09:37) el de bronce.

Las marcas de Londres 2012 estuvieron lejos de los récords olímpicos y mundiales en la Maratón masculina. El récord del mundo lo tiene Dennis Kipruto de Kenia con un tiempo de 2 horas, 2 minutos y 57 segundos logrado en la Maratón de Berlín en el 2014. Asimismo, el récord olímpico le pertenece a Samuel Wanjiru, también de Kenia, quien marcó 2:06:32 en Beijing 2008.

Oro Eliud Kipchoge Kenia 2:08:44
Plata Feyisa Lilesa Etiopía 2:09:54
Bronce Galen Rupp Estados Unidos 2:10:05

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49 carles castillejo españa 2:18:34
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65 jesùs españa españa 2:20:08




Eluid Kipchoge es un corredor de larga distancia. Obtuvo la medalla de plata en la prueba de 5.000 metros de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y la medalla de bronce en la misma prueba de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. Wikipedia
Fecha de nacimiento: 5 de noviembre de 1984 (edad 31), Kenia
Peso: 52 kg
Estatura: 1,67 m
Número De Medallas Olímpicas: 2


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Castillejo y España, puestos 49 y 65 respectivamente
Kipchoge gana el oro en maratón bajo el diluvio


Eliud Kipchoge al cruzar la línea de meta en Río.


Actualizado 21/08/2016 16:54 CET

El keniano Eilud Kipchoge se impuso en el maratón de los Juegos Olímpicos de Janeiro con un tiempo de 2.08:44, por delante del etíope Feyisa Lilesa (2.09:54) y el estadounidense Galen Rupp (2.10:05). En lo que a españoles se refiere cabe destacar el 49ª posición de Carles Castillejo (2.18:34) y la 65ª de Jesús España (2.20:08).

Kipchoge lanzó un ataque en el kilómetros 30, cuando una decena de corredores iba en cabeza, que se tradujo en una selección de cuatro luchando por el triunfo, los tres que ganaron las medallas y el etíope Lemi Berhanu. El más joven de los cuatro, Berhanu, de 21 años, ganador ese año del maratón de Boston, quedaría descolgado en el kilómetro 32.Kipchoge lanzó un nuevo ataque demoledor poco antes del kilómetro 35, quedando descolgado primero Rupp y pocos metros después Lilesa. El keniano inició allí una cabalgada en solitario a un ritmo infernal, aumentando progresivamente su ventaja sobre Lilesa y Rupp.Kipchoge disputaba su octavo maratón, ganando seis de los siete anteriores (Hamburgo en 2013, Rotterdam y Chicago en 2014, Londres y Berlín en 2015 y de nuevo en la capital británica en 2016), siendo segundo en uno (en Berlín en 2013). Antes había destacado en pruebas de fondo, siendo bronce en los Juegos de Atenas 2004 y plata en Pekín 2008 en 5.000 metros, con un oro en el Mundial de París 2003 y una plata en Osaka- 007 en la misma distancia.

http://www.marca.com/juegos-olimpicos/2016/08/21/57b9bfc022601d79448b45ac.html




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La cama de Kipchoge
Por Mario Torrecillas - 24 abril 2016 1548


El centro de Iten (Kenia) es un lugar real donde entrenan, entre otros, Eliud Kipchoge, que suele compartir habitación con otro campeón llamado Geoffrey Kipsang Kamworor. Hay una foto suya, que reproducimos aquí, donde se le muestra en su habitación, recién levantado a las cinco de la mañana, abrochándose los botones de un chaqueta de nailon para cortar el viento helado de las primeras horas de la madrugada. Esa chaqueta le cae estupendamente. El color morado sobre el negro de su piel acentúa aún más su poder. En la foto, Eliud está de pie. Mira a cámara. Y sonríe, claro. El poder de su sonrisa, sin contención ni impostura, es de una persona leal y extremadamente tímida. Eliud es de esos atleta que, como el etíope Haile Gebrselassie, sonríen siempre aunque les persiga una manada de leones. Esa sonrisa hace que le marquen mucho las arrugas de su rostro, profundas y oscuras como un pantano en la noche. Cada una de esas arrugas cuenta una historia, tienen una vida propia. Algunas podrían venir directamente de una infancia miserable. Admitámoslo, cualquier niño de occidente sería incapaz de resistir la mitad de lo que él seguramente soportó.

Particularmente, lo que llama la atención en esa foto no es la austeridad de la habitación –teniendo en cuenta que estamos en un habitáculo de ladrillo y techo de uralita–. Lo que sorprende de verdad es la cama en la que duerme y descansa el jefazo del maratón mundial. Una cama que recuerda a la que podía tener aquella sor Citroën en su convento monacal, con un minúsculo colchón, que más parece una puerta colocada en horizontal, y sin una triste almohada para dar una noche de tregua a las cervicales. Es una cama que, en una Blume o en un Centro de Alto Rendimiento de nuestro país, haría estallar el buzón de sugerencias. Una cama en la que no pondrían a dormir ni al perro del guarda. Es una cama que rechaza completamente al descanso. Tras una dura jornada corriendo una montaña de kilómetros, volver a esa habitación y ver esa cama no te darían más que ganas de salir de nuevo a correr aunque te dolieran hasta la cejas.

Sobre la cama tiene una colcha a cuadros, cuyo estampado añejo recuerda a eso paños que usan los abueletes para envolver las jaulitas de los pajarillos cuando los sacan al sol de los parques. Cualquier persona en su sano juicio invertiría algo de dinero en comprarle un colchón decente a esa cama para darle un poco de ilustre. Y no es que Kipchoge no pueda. Para nada. Lleva ganado tal pastizal en las maratones que, con ese dinero, podría surtir de colchones a media población de Kenia. Desde luego, todo ese dinero no está a la vista en la foto, y no parece que esté escondido debajo de la cama. ¿Se imaginan a un equivalente suyo, una estrella futbolista, tipo Neymar o Messi, durmiendo en una cama así?

Podría ser que esa cama fuera su amuleto y por eso no se desprende de ella. Pero su conservación responde más bien a una filosofía de vida que nada tiene que ver con la excentricidad de un loco. Kipchoge piensa que las comodidades que le pueda reportar el dinero no le harán mejor maratoniano y cree que es mejor tenerlo fuera de su alcance mientras esté en activo. Él siempre es fiel a sí mismo y por eso tiene una nota en su pared del autor brasileño Paulo Coelho, quien, particularmente, siempre me pareció un chamarilero, aunque una frase suya, asociada a este atleta, suena muy convincente, porque Eliud practica la teoría hasta las últimas consecuencias: “Si usted quiere tener éxito, debe respetar una regla: Nunca se mienta a sí mismo“.

http://www.labolsadelcorredor.com/la-cama-de-kipchoge/


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Las zapatillas de Eliud Kipchoge

Por LBDC - 21 agosto 2016 1135
Nike Zoom Streak 6 180 gramos de peso en una talla Hombres 9 USA. Se trata de un calzado de competición, unisex, con una altura de talón de 26 mm y 18mm en la parte delantera (drop de 8mm). El precio de esta edición limitada es de 100€ en Nike Store.

El equipo de desarrollo y diseño de Nike se percató hace un par de años que algunos de sus maratonianos insignia empleaban modelos de zapatillas con un recorrido en el mercado cercano a los 10 años. Y se pusieron manos a la obra. Viajaron a Kaptagat (Kenia), una localidad situada a unos 16 kilómetros al este de la ciudad de Eldoret, a una altitud de 2400 metros sobre el nivel del mar. Junto a Iten, una de las mecas del fondo mundial. Centenares de atletas recorren los caminos cada mañana. Los hay nativos, que alquilan casas, que se acercan de Eldoret y otros tantos viven en los campos de entrenamiento que se multiplican en la zona.

Detrás de estos cuarteles con nombres inocentes se encuentran los grandes depredadores de la ruta. Los mejores corredores de larga distancia del mundo. Aquellos que vayan donde vayan serán tratados como estrellas por medios de comunicación, aficionados y organizadores. Su sola presencia viene acompañada de honorarios que quitan la respiración a organizadores y patrocinadores de los principales maratones y medios maratones del mundo.

Una vez instalados, convivieron unos días con Patrick Sang, medallista olímpico y ahora en labores de entrenador en la agencia de representación Global Sports Communication. Entre sus pupilos, el actual rey del maratón mundial y recién proclamado campeón Olímpico, Eliud Kipchoge. Hablaron de sensaciones, de lo que les gusta y no les gusta de una zapatilla.

El primer prototipo llegó en vísperas del maratón de Londres 2015. Kipchoge ganó con 02:04:42 pero en el seno del equipo de desarrollo de la multinacional de Oregón siguieron trabajando. Entonces fue turno del maratón de Berlín 2015 donde Kipchoge logró firmar su mejor tiempo personal, con 2:04:00, pero lejos de su objetivo de romper o acercarse al récord mundial, en 2:02:57, por un problema en sus zapatillas. Las plantillas se desprendieron en los primeros compases de la carrera y fueron soltándose por el talón hasta concluir la prueba provocando la aparición de ampollas. ¿Cómo pudo aguantar 42kms así?

kipchoge zapatillas0

En una carrera organizada por Adidas, y las dificultades que ello comporta en la presencia de corredores patrocinados por su eterno rival, Nike se apresuró a atribuir el fallo al hecho de que Kipchoge estaba probando un nuevo modelo. “Como lo ha hecho en las carreras anteriores, Eliud estaba probando un prototipo en el que hemos estado trabajando juntos durante varios meses,” dijo el portavoz de Nike TJ Crawford.

Ese día en el Maratón de Berlin captamos las impresiones de Kipchoge sobre el incidente con su prototipo de zapatillas Nike Zoom Streak 6 que estaban dando la vuelta al mundo:


Como era de esperar este percance supuso reforzar la adherencia de la plantilla. Otro de los cambios fue la supresión del Flywire, cuentan que a sugerencia del recordman estadounidense de 3000 obstáculos y subcampéon olímpico, Evan Jager, después de una sesión donde acabó con los pies ensangrentados. El material Flywire lo componen hebras de polímero de cristal líquido recubiertas de poliester y la disposición en la zapatilla es en forma de diminutas pero increíblemente resistentes cuerdas que envuelven el piede lado a lado con la intención de sujetar el pie en todas las fases de pisada, incluso flexionando, que es cuando más protegido está.

El 14 de febrero en Los Ángeles llegaba una nueva prueba de fuego. Los trials del maratón en Estados Unidos. Galen Rupp, Amy Cragg y Shalane Flanagan calzaron un enigmático diseño de zapatilla en color blanco, donde destacaba el Swoosh de la marca de Oregón.

El Maratón de Londres 2016 vio por fin el debut oficial de la Nike Zoom Streak 6, que llegó a la meta en los pies de Eliud Kipchoge, ganador con un tiempo de 2:03:05, así como del segundo clasificado, Stanley Biwott, y de la mujer ganadora, Jemima Sumgong (02:22:58).

La parte superior está hecha de lo que Nike denomina FlyMesh que consiste en una malla ligera y transpirable por el lado exterior, y otra malla, de una única pieza para evitar costuras, por el lado interior. Existen perforaciones por toda la malla para mejorar la ventilación y es más reforzada en la zona del empeine y la puntera. Una de las principales características es el diseño anatómico que trata de aprovechar la potencia de empuje de despegue del dedo gordo del pie.

La mediasuela está compuesta principalmente de Phylon. Éste es un compuesto utilizado por Nike desde hace muchísimos años en la mayoría de zapatillas de gama alta. Este material ha sido superado por otros compuestos como el Cushlon o el Lunarlon. Aun así el Phylon sigue siendo efectivo y por tanto sigue presente en multitud de modelos. Una buena prueba de ello es la Air Zoom Elite 8 o las Nike Air Pegasus 33. Bien, el Phylon es una EVA prensada que dota de amortiguación a la zapatilla. Además, en la suela se inserta una placa de Pebax.

Nike zoom streak 6

La zona interior de la mediasuela es un pelín más alta que la exterior. Y es que, a pesar de ser una zapatilla pensada para corredores de pisada neutra, es una pequeñita ayuda a mantener contenido el tobillo cuando rota. Esto es bastante visible a la altura del arco plantar.

Nike streak

180 gramos de peso en una talla Hombres 9 USA. Se trata de un calzado de competición, unisex, con una altura de talón de 26 mm y 18mm en la parte delantera, lo que arroja un drop de 8mm. El precio de esta edición limitada es de 100€ en Nike Store.

http://www.labolsadelcorredor.com/las-zapatillas-de-eliud-kipchoge/

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